Cuando algo me desanima o desequilibra, arrugo la frente, me sorbo los mocos y digo: no importa, este no es mi lugar, cuando llegue a mi lugar será diferente, ya no pasará. Ahí van a ver. Ahí voy a ver.

¿Pero y si nunca llego a mi lugar? O si no tengo lugar. O si mi lugar nunca se vuelve un espacio apto para dormir y comer y vestirse. Y si insistir en mi lugar es sinónimo de morirme caminando desnuda y con la guata como sonajera.

Quiero hacerme de un espacio y un lugar pa estar en esta rareza de mundo. Y lo estoy intentando, prometo que sí. Pero me siento los tres chanchitos juntos y quizá también el lobo. El capitalismo es el lobo, el MINCAP es el lobo.

blablabla